Durante mi actividad profesional y en especial en las asesorías y charlas que le he dado a los estudiantes, me he topado constantemente con ideas brillantes, con soluciones geniales por su simplicidad a problemas personales o comerciales y que sin embargo nunca han podido ser llevadas a cabo, esto, me llevo a indagar, por que, si la solución muchos la conocían fueron incapaces de llevarla a delante, inicie la búsqueda en los sentimientos humanos típicos de muchos gerentes en etapa de crecimiento, miedo escénico, envidia, miedo al rechazo y aunque en muchos de los encuestados pude percibir que algunos de estos sentimientos, de una u otra manera se habían superado, la solución no llegaba, revise las decisiones al respecto e incluso estudie el ambiente laboral y el histórico de procedimientos de algunas empresas y allí después de muchas horas de entrevistas y lecturas, encontré lo que para mi es la causa del problema, evidentemente no descubrí la rueda, pero si la puse a rodar…
Comunicación…
El eterno gran problema de los humanos.
Estudiando la vida y el proceder de algunos exitosos como Bill Hewlett, Jeffrey Bezos, Ray Kroc, Rudolf Giuliani, Carlos Eduardo Frías, William Henry Phelps y hasta del propio Jesucristo, note, por supuesto, salvando las distancias, un rasgo en común, un punto de encuentro, que nos es otro, que la extraordinaria facilidad que tenían para hacerse entender, para expresarse, para comunicar una idea.
En la actualidad la gran mayoría de los gerentes invierten millones en cursos de marketing, de análisis, de comprensión financiera, de estadísticas e incluso las empresas destinan gran cantidad de tiempo de su personal en entrenamientos de este tipo, ojo no digo que no sean necesarios, en lo personal tengo varios diplomados de este tipo y fueron de una enorme utilidad en mi vida profesional, pero debo recomendar a las personas y a las empresas que además de los cursos ya mencionados deben necesariamente formarse en oratoria, en expresión corporal, en comunicación efectiva, es vital saber decir lo que queremos decir, es necesario hacernos comprender por nuestros colaboradores y nuestros superiores, a veces se nace con ese capacidad y de manera innata logramos hacernos entender fácilmente, pero también se puede aprender, se puede perfeccionar, yo tuve un gran maestro de oratoria y liderazgo ,fue mi propio padre, Carlos Lander Vegas, Actor, Locutor, Comerciante, Empresario, Líder gremial y político, fue, desde vocal del sindicato de trabajadores de Mercados Libres, hasta Presidente de la Federación Internacional de Trabajadores del Espectáculo en México, pasando por la Secretaria General del Sindicato de Radio y Televisión en Venezuela, Concejal, Diputado y Senador de la Republica, hasta sus días finales cuando formo parte de la Junta Directiva del Banco Nacional de Ahorro y Préstamo, Un día siendo yo un niño, y después de verme discutir horas con mi hermana, Papa, dejo un viejo recorte de prensa sobre mi cama, estaba amarillo y envejecido por el tiempo pero se podía leer:
” La habilidad en expresar una idea, es tan importante como la idea misma."
Bernard Mannes Baruch
The Lone Wolf on Wall Street
